El trabajo en el Sector Agrícola en Chile

El año 2015, la Dirección del Trabajo publicó un estudio de la Sindicalización en el sector agrario, específicamente en las regiones de O´Higgins y El Maule. En esta publicación se realiza un análisis profundo del fenómeno de la sindicalización en el sector agrícola, la historia e hitos que han marcado el derecho colectivo en la agroindustria.

Uno de los fenómenos que se identifican, es la particular precariedad que caracteriza el empleo en este sector. Dentro de las causas principales está el tipo de empleo que abunda en la agricultura: el trabajo por temporada, el trabajo subcontratado y la alta presencia de trabajo migrante. Este tipo de empleo representa un obstáculo en la conformación de organizaciones sindicales.

Una cifra preocupante es que el aumento del empleo temporal ha ido de la mano de una disminución del empleo permanente, mediante un proceso lento y continuo en las últimas décadas. En 1997 el empleo permanente era casi tres cuartos del empleo total en la agricultura (73,5%), diez años después, este representaba el 40,5%.[1]

Dos factores que se consideran para determinar la precariedad en el trabajo agrícola, son la estabilidad o continuidad de la relación laboral y la cobertura respecto de la seguridad social. La primera dimensión incluye los tipos de contratos presentes entre los asalariados agrícolas, como señalamos anteriormente. La segunda está referida a la cobertura de la seguridad social: la existencia o no de contrato de trabajo y la cobertura previsional.

Otro problema que nos permite establecer la precariedad del empleo agrícola, es el problema de la cobertura de la seguridad social de los trabajadores que laboran en las modalidades antes indicadas. Un estudio del Instituto Nacional de Estadísticas concluye que las garantías y derechos sociales de los trabajadores por temporada es más bajo en relación a los trabajadores con empleo permanente.

Es importante plantearse el problema de la precarización del empleo agrícola en nuestro país, especialmente considerando que es uno de los sectores principales de la economía nacional. Siendo un país reconocido por la actividad agraria en el mundo, se debe poner atención a la problemática laboral en este sector. Si se quiere avanzar a una modernización esta debe ir de la mano con una actualización de las prácticas laborales que lo rigen. Tomando en cuenta la precarización que ha caracterizado y caracteriza el empleo agrícola, la presencia de organizaciones sindicales fuertes puede ser un factor positivo y relevante para la fiscalización y exigencia de condiciones laborales básicas en la industria.

Antonia Morales Alemparte

Abogada Área Negociación Colectiva

[1] Sindicatos y negociación colectiva en el sector agrario. O’Higgins y Maule, Riquelme Giagnoni, Verónica. Dirección del Trabajo (2015).